El sector de las microfinanzas nació como respuesta a la necesidad de democratizar el sistema financiero, su mayor boom se alcanzo ente el 2003 y 2009, con un crecimiento anual de la cartera cerca al 50%. Este sector no solo fue ampliamente apoyado por los gobiernos, sino también por donantes e inversores de línea social, no obstante, poco a poco este sector empezó a resentirse rápidamente por el aumento de los índices de morosidad. Estudios afirman que el aumento de la competencia, el aumento de la liquidez, la relajación de las restricciones de crédito, la ausencia de historiales de crédito dio lugar a altas tasas de morosidad que desencadenaron importantes crisis de pago en el sector de microfinanzas.
Abonado al tema de la morosidad, el fraude se ha convertido en un factor recurrente y de gran preocupación, son miles los casos donde ejecutivos del sector de las microfinanzas han aprobado créditos de alto monto a conocidos o familiares que nunca fueron pagados, sumado a esto también es reconocible que en ocasiones no se aplica correctamente las tecnologías del microcrédito, que consiste en una metodología de riesgo descentralizada y visitas frecuentes al negocio de los clientes de manera frecuente.
Las falencias del sector evidenciadas desde antes de la crisis han aumentado en rango con la pandemia que aún no anuncia su fin, entonces la pregunta que surge es ¿cómo potencializar un sector de tanto interés en países con gran una gran brecha social como lo son los países latinoamericanos?
En primer lugar, es entender que la tecnología heredada del sector bancario no es la solución que requiere el sector, puesto que el credit scoring usado por este no se adapta a la realidad de los clientes de las microfinancieras, quienes tienen negocios en su mayoría inestables e informales, que requieren de plazos de pago diferenciados de acuerdo con las características de cada usuario. De esta misma manera el sector de microfinanzas requiere de tecnología que no solo le permita disminuir el riesgo de cartera vencida, sino que le permita ejercer los controles necesarios para evitar o prevenir comportamientos sospechosos por parte del equipo de trabajo, y más en la actualidad, cuando un gran número de empresas han priorizado el teletrabajo, lo cual puede significar la reducción de controles y el aumento del porcentaje de fraude.
Es así como Sifco ha creado un producto especializado para el sector microfinanciero, con el firme propósito de apoyar la democratización económica en los sectores con menor acceso al sector bancario. B1 Financial es el software perfecto que cuenta con la versatilidad y flexibilidad que su organización necesita, para entregar bienestar y un futuro próspero y digno a más familias latinoamericanas.